Proyecto incorporación nueva zona jardín en el jardín histórico «Quinta los Molinos».

Situación: Calle de Alcalá, 527, Madrid.
Fecha: 2004

Proyecto realizado por encargo de la Sección de Parques y Jardines Históricos del Ayuntamiento de Madrid.

El proyecto define la incorporación de una nueva zona ajardinada en el oeste del jardín histórico “Quinta de los Molinos” de Madrid. La superficie del solar objeto de la intervención es de 4.185 m2, medida en proyección horizontal, comprendiendo los terrenos que se encuentran limitados por las tapias de la zona oeste de la quinta, la valla que cierra el campo de deportes anexo y el muro que limita el solar por la calle de Alcalá.

La quinta fue un jardín privado convertido en público por cesión al Ayuntamiento mediante convenio urbanístico suscrito por la Gerencia Municipal de Urbanismo y los herederos de su propietario, el arquitecto Cesar Cort.

La idea generadora del proyecto se basa en el aprovechamiento de las condiciones topográficas del lugar y su altura respecto del jardín histórico, creando unos caminos y un área estancial que permitan la contemplación total del jardín. Se mantiene los taludes preexistentes y la tapia, límite actual del jardín, aunque reformada y se ejecutan nuevos caminos, siendo el principal el superior, para cuya formación se propone la construcción de una viga de hormigón de gran canto apoyada en pilotes. También se proyecta un edificio auxiliar para el mantenimiento del jardín, aprovechando la tapia existente hacia la calle de Alcalá, en la zona sur del jardín, al que se accede desde el jardín histórico y una nueva plantación en toda la nueva zona, que incluye cipreses en la cota más elevada, para formar una barrera visual hacia el campo de deportes, y almendros en la parte intermedia.

Las conexiones entre el jardín histórico y el nuevo jardín se establecen en dos lugares: en primer lugar cerca del acceso al jardín por la calle de Alcalá, donde las cotas del terreno son prácticamente iguales, demoliendo un entrepaño de la tapia existente, en una zona donde no hay pies de cipreses que pudieran quedar afectados y en segundo lugar en la zona norte del nuevo jardín, accediendo directamente al camino inferior o bien mediante una rampa al camino superior.